El Madrid viaja a Turín con toda su artillería pesada a punto. Los dos galácticos que permanecían en cuarentena, Zidane y Raúl, se ejercitaron a pleno rendimiento ayer y todo parece indicar que saldrán en el once titular el próximo miércoles. Los dos trabajaron al margen del resto de la plantilla y desde el primer momento evidenciaron que tienen hambre de balón ya que en la clásica carrera continua de calentamiento que completan alrededor del campo tomaron un balón y no pararon de realizar paredes cortas entre ellos.
Antonio Mello, segundo de Luxemburgo (quien no asistió al trabajo de sus pupilos), organizó una exigente sesión de remates para Zidane y Raúl. El capitán sigue cuidándose tras la fuerte gripe que le ha mantenido de baja desde el envite de ida, que incluso le ha provocado perder algo de peso, y en muchos momentos del entrenamiento sólo se le podían ver los ojos al resguardarse con gorro y verdugo en el cuello.
Mientras, Zidane, que se ha perdido los dos últimos encuentros por la elongación muscular que sufrió en Riazor, demostró estar plenamente recuperado y mantuvo un gracioso pique con César. El portero no dudó en picarle en broma con frases como "Venga, remata calvito".
Owen ya está listo.
Lo cierto es que a pesar del empate en Valencia, que ha provocado perder dos puntos respecto al Barcelona, el Real Madrid llega con el estado de optimismo proclamado desde la llegada de Luxemburgo intacto. Aunque la distancia en la Liga no parezca insalvable, los jugadores del Madrid parecen enfocar sus pretensiones reales esta temporada en la Champions.
Incluso Owen se ha recuperado de su gastroenteritis por lo que el único quebradero de cabeza que se le presenta a Luxemburgo es elegir entre lo mucho bueno que tiene. ¡Que tiemble la Juve!
Las lesiones condenaron al Madrid en la vuelta
En 2002 el Madrid se impuso sólo por 2-1 en el encuentro de ida en el Bernabéu pese a su abrumador dominio. Para la vuelta, el infortunio se cebó con el conjunto blanco, que vio cómo Ronaldo llegaba renqueante de la lesión que se produjo en el primer partido, que Raúl reaparecía muy justo de forma tras su operación de apendicitis y que Zidane jugaba pese a sus problemas de espalda. Estos elementos y la horrible actuación de Hierro contribuyeron a la remontada de la Juve, que se impuso por 3-1 pese a que Figo pudo cambiar el sino de la eliminatoria con un penalti errado con 2-0.
En esta ocasión, el Madrid se presenta en Turín con un mejor resultado (1-0) y con todos sus elementos en plena forma por lo que las lesiones no serán excusa. Luxemburgo tiene a todos sus galácticos a punto.
Once de gala sin Salgado
Todo parece indicar que la recuperación de Zidane y Raúl provocará que Luxemburgo se la juegue en Turín con su habitual once de gala desde que aterrizó en el banquillo del Madrid, salvo la presencia de Raúl Bravo en el lateral derecho en lugar del lesionado Míchel Salgado. Esto significará que Solari, Owen y, sobre todo, Guti, que completó una gran actuación en Mestalla, se sentarán en el banquillo. El canterano volverá a ser sacrificado para que jueguen todos los galácticos, como viene siendo costumbre desde hace ya varias temporadas. El técnico se la jugará basando sus bazas ofensivas en la pareja Ronaldo-Raúl y el rombo en la medular compuesto por Gravesen, Beckham, Zidane y Figo.
