El vestuario del Roma se hace ingobernable

Serie A | Roma

El vestuario del Roma se hace ingobernable

El vestuario del Roma se hace ingobernable

Ningún entrenador soporta a Totti y Cassano

Para crisis gorda, la del Roma. Lo demás son tonterías. En cuatro meses, cuatro entrenadores. Y ya andan buscando el quinto. El equipo giallorosso es ingobernable. Por eso se va Rudi Völler y por eso se fue Cesare Prandelli, aunque la justificación oficial de su marcha fue la grave enfermedad de su mujer. El único capaz de manejar a estos jugadores era Fabio Capello, pero su relación con la familia Sensi, propietaria del club, se deterioró y optó por irse a la Juventus. La afición romanista consideró su marcha una traición, pero los acontecimientos le han venido a dar la razón.

En el Roma mandan sus figuras. Sobre todo, los díscolos Totti y Cassano. De Cassano, que podría ser un extraordinario futbolista si tuviera un mínimo de disciplina, nadie es capaz de hacer carrera. Es un problema durante toda la semana, menos las dos horas que dura el partido. Y a veces, ni eso, decía sotto voce Capello. Cassano fue el primer encontronazo de Völler. Discutió en un entrenamiento con Ezio Sella (entonces, su ayudante; ahora, entrenador interino), se insubordinó y tuvo que mandarlo tres días a casa. Luego vino el mazazo de la Champions League, cuando Anders Frisk suspendió el partido tras haber sido alcanzado con un objeto lanzado desde la grada. Minutos antes, el árbitro sueco había tenido que expulsar a Mexes por una chiquillada. El pasado miércoles, el Roma empató en su estadio con el modesto Messina gracias a que a Totti se le ocurrió la genialidad de lanzar un penalti a lo Panenka. Se lo paró el portero sin tener que moverse, claro. Y este sábado, en el descanso del partido con el Bolonia, con tres goles ya en contra, a Montella le pillaron las cámaras de televisión en una conversación con Sella en la que estaba poniendo a parir a Völler por haberlo dejado en el banquillo. Fue la gota que colmó el vaso.

El Roma sólo ha ganado un partido, el primero de Liga, ante la Fiorentina. Desde hace 54 años, no encajaba tantos goles. Busca entrenador. Se habla de Luigi del Neri y de Arrigo Sacchi, pero tal vez tenga que tirar con Sella hasta final de temporada. Ese banquillo está maldito.