Carles Rexach, secretario técnico del FC Barcelona, ha quedado este viernes desvinculado de la entidad catalana tras llegar a un acuerdo por el cual recibirá el importe total del contrato como técnico que expiraba el 30 de junio de este año.
A pesar del acuerdo ya firmado, según pudo saber EFE de una de las partes de la negociación, el club y Rexach resolvieron no dar a conocer por el momento los detalles de la liquidación.
Rexach fichó por el Barcelona hace dos años y medio como asesor de Joan Gaspart, aunque mejoró su contrato después de hacerse cargo del equipo hace dos años.
Rexach diseñó el Barcelona de las últimas tres temporadas
Su vinculación fue entonces como entrenador y posteriormente como secretario técnico, aunque nunca cesó en sus funciones como asesor, cuyo compromiso era hasta junio del 2005, cuando expiraba el mandato del presidente ya dimitido.
Con el adiós de Carles Rexach, el Barcelona pierde al artífice que diseñó el Barcelona las últimas tres temporadas, bajo la supervisión del presidente dimitido Joan Gaspart y del ejecutivo Anton Parera, que fue despedido por la entidad la semana pasada.
De esta forma, el Barcelona ha perdido en menos de un mes a las tres personas que pusieron los cimientos deportivos de la actual plantilla, en la que destaca, por encima de todo, el cambio de orientación de la entidad, que prefirió contratar futuras promesas a jugadores consolidados, aunque no por ello se redujo la inversión económica, un hecho que hasta hoy sigue siendo motivo de polémica en el entorno del club.
Las elecciones del 2000 devolvieron a Rexach a un primer plano
Rexach, un histórico del Barcelona, cerró su segunda etapa en la entidad, después de que en los primeros años de Louis van Gaal en el conjunto barcelonista, con José Luis Núñez al frente de la entidad, el entrenador catalán decidiese probar fortuna en Japón como entrenador en el Yokohama Marinos.
Las elecciones del 2000 devolvieron a Carles Rexach al primer plano de la actualidad, después de que Joan Gaspart lo incluyese en su equipo electoral como futuro director técnico y asesor del presidente, quien, junto a Llorenc Serra Ferrer, definieron el Barca de la temporada 2000-01.
Tras el fracaso deportivo de Serra Ferrer, Rexach se hizo cargo del equipo a pocas jornadas del final de la temporada, cuyo único cometido fue que el conjunto catalán se clasificase entre los cuatro primeros, objetivo que obtuvo.
Christanval, Geovanni y Rochamback los trajo Rexach
En la temporada siguiente, y ante los fracasos de la entidad en hacerse con un entrenador de reconocida experiencia, Gaspart le entregó el testigo a Rexach para que llevase las riendas del Barca de la temporada 2001-02.
Rexach, no sólo ha sido el máximo responsable del equipo, sino que ordenó el fichajes de jugadores que no cuajaron (Christanval, Geovanni y Rochamback, entre otros) y que en la actualidad no son habituales en las alineaciones e, incluso, han sido cedidos (Geovanni, al Benfica).
Rexach concluyó la temporada y clasificó nuevamente al Barca para la siguiente Liga de Campeones, al quedar otra vez la entidad en cuarta posición, pero cedió el testigo a Louis van Gaal, al cual avaló, a instancias de Gaspart, para que ocupase el cargo, después de sentirse defraudado por no continuar como máximo responsable.
Enric Reyna pactó con él un acuerdo amistoso
Esta temporada, con Van Gaal como primer técnico del equipo barcelonista, Rexach ocupó la función de director técnico, aunque su cometido principal fue el de ojeador. Tras la destitución del entrenador holandés, Rexach pasó nuevamente al primer plano para ocupar el banquillo en competencia con César Luis Menotti y Radomir Antic, aunque el técnico catalán se descartó para la responsabilidad.
En la actualidad, Rexach no tenía una función específica, al margen de la de asesor del presidente Gaspart, aunque con la dimisión de éste, el histórico barcelonista quedó desconectado del día a día del primer equipo.
Con la llegada de Enric Reyna, presidente interino del club, la entidad ya se había dirigido hace unos días al técnico barcelonista para llegar a un cuerdo amistoso, aunque sin forzar la relación, caso contrario a lo sucedido con Anton Parera, a quien la entidad obligó a cesar en sus funciones bajo amenaza de presentarle una carta de despedido.
Además de la vinculación de Rexach con la entidad como técnico, el entrenador también estaba ligado con el club con un contrato como asesor del presidente, vinculación que también ha quedado zanjada.
