El defensa central Héctor Toledo, de 32 años y que milita en el Lota Schwager, de la Primera "B" del fútbol chileno, ha sido sancionado con 30 partidos de suspensión por propinar un puñetazo al árbitro chileno René de la Rosa, ha informado este martes el Tribunal de Disciplina de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional.

"Yo no recuerdo una agresión de esta naturaleza, de estas características", ha señalado el abogado Angel Botto, presidente del tribunal deportivo.

Toledo agredió al árbitro durante el partido que jugaba su equipo contra el Deportes Arica, en Arica, a 1.650 kilómetros al norte de Santiago de Chile. De la Rosa señaló un penalti a favor del equipo local y luego expulsó a Toledo por reclamar de forma airada a los 44 minutos de juego. El jugador, molesto por la decisión, propinó un derechazo al rostro del colegiado que quedó inconsciente. El partido se suspendió de inmediato y Toledo fue detenido por la policía por infracción de la Ley de Violencia en los Estadios.

"En este caso hay una inconducta que no se puede permitir. El día que usted asume por mano propia la justicia, el sistema se desmorona", afirma el abogado Botto.

La sanción es la mínima que contempla el reglamento para las agresiones a árbitros con resultado de lesiones, que contempla un 'castigo' de entre 30 y 50 partidos.

Toledo ha recibido la suspensión mínima por "sus buenos antecedentes".

"Me merezco un castigo, es lógico. Estoy arrepentido por el grave error que cometí. Estoy viviendo un verdadero calvario", dijo Toledo antes de conocer el fallo del tribunal del fútbol chileno.