En una multitudinaria rueda de prensa, Jesús Gil anunció que abandonará hoy mismo la alcaldía de Marbella. Esta es la primera reacción del presidente del Atlético tras salir de la cárcel (igual que hicieron ayer Juan Antonio Roca y José Luis Jiménez, otros dos imputados en el caso del ‘saqueo de Marbella’) y cuando es inminente el juicio por irregularidades en la conversión en sociedad anónima del club rojiblanco.

"Mi estancia en prisión ha sido muy dura. Lo único en lo que pensaba era en la manera de pasar las horas. La incomunicación es terrible. Pasé la tarde del domingo haciendo cábalas con los resultados de la jornada para ver si el Atlético podía subir este sábado. También jugué al parchís con un hombre que me dijo que era campeón del mundo y le gané veinte euros. Hay presos que me han enviado cartas muy conmovedoras. En la cárcel se para el reloj, a diferencia de lo que ocurre en los partidos que el Atlético va perdiendo, en los que el tiempo vuela. Para salir, tuvo que pagar la fianza un joyero amigo mío. (...)".

"(...) Os voy a descubrir dos de los mayores atentados que he visto contra el Estado de Derecho. Primero, antes de mi declaración, una persona muy revelante le dijo a su señoría que estaba muy preocupado porque el jueves anterior don Pedro J. Ramírez se jactaba entre bastantes personas diciendo: ‘El martes próximo (refiriéndose al día 16) metemos a Gil en la cárcel’. Segundo asunto, declaré en una indefensión total porque se incumplió el pacto de darme todo el expediente para que pudiéramos contestar adecuadamente al fiscal. (...)".

"(...) Comprendo que el señor Pedro J. Ramírez tiene gran interés, como pasó con el viaje de Felipe, en demostrar que las acusaciones que se hicieron en su periódico en 1999 eran ciertas. Que el saqueo de Marbella era una realidad. Pero yo se lo desmonté todo. Tuve una entrevista con Rubio y Cerdá (periodistas de El Mundo) y les puse al habla con la persona a quien se imputa la creación de cuatro sociedades factureras. Cuando este señor les dio la explicación, reconocieron que les podía haber equivocado alguien que me quería mal. Esas sociedades factureras sólo existen en la imaginación del que vendió la idea a Pedro J. (...)".

"(...) El objetivo era quitarme la alcaldía y con que hubiera mirado ese cuadro de ahí hubiera valido. La pena que me da, y que es una ironía, es que me quitan la alcaldía por el Atlético, que es quien ha hecho más por Marbella pues estuvo sin cobrar la esponsorización durante ocho años. Ahora pueden quitarme el Atlético. Tengo que sentarme otra vez en el banquillo por otro invento de Castresana. La conversión en S.A. fue correcta. Entonces, como eso fue legal, ahora sacan que me apropié del dinero. Éste es otro de los fraudes de la Fiscalía Anticorrupción. Adoro a mi Atlético. A ver quien presta dinero al club como he hecho yo con los 3.000 millones de pesetas que puse por Hasselbaink y de los que no he vuelto a ver un duro. (...)".

"(...) Tengo en mi poder un documento que os voy a enseñar sólo desde lejos para que veáis que es oficial. No preguntéis como lo he conseguido porque esto me lleva otra vez a la cárcel. Está firmado por el Fiscal General del Estado y dice: ‘Se decretará prisión incomunicada para Jesús Gil y Gil el próximo día 19 de abril de 2002’. Esto se firma el 15 de abril. Es muy gordo lo que se dice aquí. ¿Cómo un fiscal jefe, a instancias del señor Villarejo, puede decir que a usted se le va a detener dentro de cuatro días? Eso no es un Estado de Derecho. Esto no se hacía ni en las épocas de Idi Amin y Bokassa. Y yo fui como un chivo, como un corderito, como un conejillo de indias, al matadero. Si la orden estaba ya dada, ¿el juez qué pintaba? La declaración fue un simulacro. La fiscal se olvidaba de cosas y el juez le hacía señas para recordárselo. (...)".

"(...) He entregado el pasaporte porque me tratan como si fuera un criminal peligroso. Cada seis días me tengo que presentar en una comisaría. A Al Capone se le trató mejor. Han mandado órdenes a la Policía y a la Guardia Civil para vigilar que no me escape. No voy a huir nunca, me tienen que matar antes. Voy a defender mi inocencia. (...)".

"(...) Quisiera hacer un ruego al presidente Aznar, al que veo muy reposado hablando en la televisión de que estamos en un estado democrático: ‘Con todos los respetos le pido que ponga coto a esta carnicería. Soy un perseguido político por los errores que he cometido, pero usted no puede recurrir al tópico de que decir que ustedes no interfieren en la administración de justicia. Porque sabe que eso no vale para mí’. Conmigo se pueden cometer todo tipo de tropelías. Cuando les iba a quitar un millón de votos bien que involucraron a todo el aparato del Estado. (...)".

"(...) Señores, solemnemente les digo que ahora me voy a Marbella y mañana (por hoy) presento la dimisión como alcalde. A las doce daré una rueda de prensa para explicarle al pueblo de Marbella el precio que he tenido que pagar por salvar la ciudad y agradecerles que siempre hayan creído que su alcalde no ha robado. Lo que ha hecho Gil es un milagro. Me encontré una ciudad desolada donde nadie invertía, y el único error que yo he cometido fue creer que Marbella era mía. Era mi obsesión y fui un imbécil. Me lo tomé como si fuera una empresa en crisis que había que salvar. Tuve que luchar contra todos y, con mi marcha, les va a pasar como a los comunistas cuando dicen que contra Franco vivían mejor. Ahora, cuando digan sus tonterías, nadie les va a hacer caso. ¿Cómo voy a haber robado dinero de Marbella si no había? (...)".

"(...) CajaMadrid es la única entidad que no quiere cobrar el dinero que le debe Marbella. Pero ya sabemos como funciona esta entidad que antepone intereses políticos a los empresariales. Me somete a una persecución. Al Atlético, ni un duro. Al Real Madrid, lo que pida. Si quiere siete Zidanes, pues siete Zidanes. Y a mí no me fichan ni al portero de la esquina. (...)".

"(...) El Atlético ha sido utilizado indebidamente. He hablado con Luis y, si nos dejan, estoy seguro de que haremos un equipo importante para el año que viene en Primera. Si ganamos el sábado, yo iré a Neptuno. Me sentaré allí y, aunque sólo sea, me tomaré una cerveza con aquellos que estéis conmigo. La afición que haga lo que quiera que, si digo algo, dirán que levanto a las masas. (...)".

"(...) Para concluir, recordarle a Aznar que a mí ya me han eliminado, me voy de España hasta que esto cambie, pero sería un baldón para esto que se llama democracia que se acaben con estas persecuciones políticas. Ningún director de periódico, en connivencia con la Fiscalía Anticorrupción, puede asesinar a un ciudadano honrado. Yo tengo una familia a la que adoro, que está sufriendo muchísimo. No puedo seguir martirizándoles. Me iré del país cuando se termine esta situación y recupere mi dignidad. Nunca voy a huir, que nadie piense eso. No puedo vivir en España ya. Me iré a Brasil, a una casita allí en el mar, para estar dos o tres años con mi mujer, que la tengo amargada a la pobrecilla. Aquí he acabado mi etapa, me han masacrado y tengo que pagar el precio de mis errores hasta que diga el señor presidente del Gobierno. Decirles que, si se va a por una persona es mejor que no se sepa, que la gente continúe creyendo que hay una democracia, porque sería terrible que todos supiéramos que eso es falso. Al que se dé cuenta de todo, que lo maten. Pero, mientras tanto, esto va funcionando. Nada más. Muchas gracias.(...)".