Se esfuma Capello, por lo visto. En realidad, le hace un favor al Barça esfumándose. Capello, tras Van Gaal, Serra y Rexach, invitaría a sospechar que Gaspart es del Madrid o del Espanyol y trabaja por la destrucción del Barça. Además de tostón, Capello es carísimo y el Barça está tieso como la mojama. Le favorece que se quede en el Roma. ¿Ven como el Barça sí genera buenas noticias? Y nosotros las publicamos, tan contentos.

El asunto de la sucesión de Rexach se pone bravo, pues. Los más próximos a Charly dicen que se irá en junio. Pero otros sostienen que no renunciará al año de contrato que le queda, que lo convertirán en director deportivo y que al actual, a Parera, lo mandarán de relaciones con la UEFA, la FIFA y lo que quede del COMECON. O sea, nada. La lista de probables es inmensa. Bianchi está atado hasta el 30 de abril. Lo hizo Gaspart por si necesitaba cargarse a Rexach por la vía rápida. Por si lo tumbaba el Galatasaray, vamos. No pasó y Bianchi cobrará su dinerito por guardarle la vez al Barça.

Luego están Irureta, Víctor y Luis Fernández, algún hombre extraño tipo Scolari y, ojito, Luis Aragonés. Ha habido contactos serios, nos filtra gente bien informada de los asuntos del Barça. Ya los hubo hace un año, pero no cuajaron. Al tanto con Luis, magnífica apuesta para ordenar esa casa de locos. Al tanto.