La directiva de Osasuna reconoció ayer que un empleado del club falsificó unos avales de Caja Navarra en los pagarés que sirvieron para cerrar el fichaje del australiano John Aloisi, y que fueron entregados al Coventry City inglés, el club de procedencia del delantero rojillo. Javier Miranda, presidente de Osasuna, reconoció la existencia de esas firmas fraudulentas que llevaban el nombre del director general de la entidad financiera navarra, Lorenzo Riezu, si bien aseguró que esa falsificación sólo sirvió para agilizar los trámites de la operación, y que en ningún momento sirvieron para que alguien obtuviera un beneficio personal por ello.

Aloisi, que es el fichaje más caro de la historia del club, costó 320 millones de pesetas. 80 ya se han hecho efectivos, mientras que otros tres pagos, también por importe de 80 millones de pesetas cada uno, y que están garantizados con avales falsificados, están pendientes de ejecución.

Tanto Caja Navarra como Osasuna, que desconocían la existencia de estos avales fraudulentos, han presentado sendas denuncias con el fin de tratar de aclarar la ilegal situación. Todos los síntomas indican que el gerente del club, Ángel Vizcay, podría estar tras el caso, aunque Miranda emplazó a hoy para saber quién es el responsable, una vez que el gerente y otros empleados de la administración del club culminen la investigación que se ha iniciado.

Javier Miranda declaró que si, como todo indica, la responsabilidad recae en un empleado del club, él sería partidario de retirar la denuncia y de perdonarle. "Aunque quien lo haya hecho ha obrado muy mal, hay que tener en cuenta que solamente lo hizo por los intereses de Osasuna y que no se ha beneficiado en nada".

Asimismo, Miranda considera que si esta persona se disculpa ante los responsables de Caja Navarra, "la entidad financiera también debería retirar su denuncia y zanjar el asunto con un abrazo".