Miami Heat ya espera en la final de la Conferencia Este al vencedor de la semifinal Bulls-Hawks (3-2 para los Bulls, hoy, sexto partido en Atlanta). Los Heat derrotaron por 97-87 a los Boston Celtics, sellando el 4-1 en su serie semifinal. El partido Miami-Boston terminó con un parcial de 16-0 para los Heat, con los diez puntos finales de LeBron James (33 puntos, 5/7 en triples). Además, Dwyane Wade aportó 34 puntos, 10 rebotes y cinco asistencias a la cuenta de los Heat. 14 puntos y 11 rebotes de Chris Bosh completaron la secuencia del 'Big Three' de Miami. "Todo esto es gracias a que en Miami podemos jugar con los dos mejores jugadores del mundo, Bron y DWade; sólo cabe estar agradecidos", alabó Bosh. Si los Bulls se clasificaran hoy, la final del Este comenzará probablemente el domingo en el United Center de Chicago.

En Oklahoma City, los Thunder zarandearon a los Grizzlies (99-72) se adelantan con 3-2 y ya pueden sentenciar esta semifinal del Oeste mañana viernes, aunque no será fácil: la serie retorna al FedEx Forum de Memphis, cubil de los heridos Grizzlies. Dallas Mavericks ya espera al ganador para arrancar la final del Oeste.

Mientras, en Los Angeles seguían las ruedas de prensa de despedida de los Lakers. Kobe Bryant calificó como 'absurdo' el sentimiento de que ha podido empezar la decadencia de este su equipo de los Lakers. Resumen de Kobe: "Considero éste como un año perdido en mi vida, pero ahora mismo sólo me duele el tobillo izquierdo, cuando hace un año me tuve que operar de la rodilla. Esto quiere decir que me puedo pasar el verano haciendo un buen trabajo para fortalecer las piernas". También le tocó a Phil Jackson, quien planteó sus ganas de hacer rutas turísticas en motocicleta y visitar islas semidesiertas, a lo Robinson Crusoe. Jackson hizo alguna revelación comprometedora: "En todo el año no he llegado a hablar con Jim Buss (presidente de operaciones de los Lakers, aunque sí he conversado a veces con Jerry (padre de Jim y propietario de los Lakers); mi gran relación en el trabajo era con Mitch Kupchak ('general manager'); no tengo planes para volver a entrenar ahora mismo, mi idea es no hacerlo... pero lo que vaya a pasar en seis meses ya no lo sé, no estoy seguro". Es fácil imaginar lo que puede ocurrir a partir del otoño en Nueva York y sus tabloides, cuando los Knicks pierdan cuatro o cinco partidos seguidos...

El partido de Miami incluyó varias secuencias memorables, como LeBron James arrodillándose en la pista cuando todo terminó, viviendo su propia felicidad al margen del mundo exterior. "Tendría que estar hablando durante dos horas para contar todo lo que me estaba pasando por la cabeza... ganar al fin a los Celtics... la Decisión que tomé de venir a Miami, las agresiones de todo tipo que recibí por ello. Ya he pedido muchas veces perdón a la gente de Cleveland por cómo ocurrió todo, pero esta oportunidad sólo aparece una vez en la vida; con los Celtics nunca puedes levantar el pie del pedal, te hacen competir siempre", explicó James.

Otra secuencia ya en You Tube: una canasta circense de Wade, a 1:22 del final del primer cuarto, navegando y chocando por la zona 'celtic'... y anotando bajo Jeff Green, al que sacó la falta, sin mirar casi al aro. "Desde esta verano, esta era la final del Este que siempre quisimos y tuvimos en mente", admitió Erik Spoelstra, entrenador de Miami.

Los Celtics acertaron el 53% de tiros en la primera parte... y sólo iban ganando por 47-49 en el descanso. Boston no anotó un solo punto en los últimos 4:28, tras la canasta de Krstic que valió el 81-87. El transatlántico 'celtic' acabó yéndose al fondo con 49,3% de aciertos en el tiro, inferioridad en rebotes (38-30), y 17 pérdidas de balón como 17 vías de agua. El 'passing game' de Miami ofreció 13 asistencias y sólo nueve pérdidas. Boston, 15 asistencias... y las 17 pérdidas citadas. Ray Allen (18 puntos) y Kevin Garnett (15 puntos y 11 rebotes) fueron los mejores 'celtics'.

"Dimos nuestro mejor esfuerzo en el tercer partido, y eso nos dejó muy tocados. Soy un 'celtic', amo a este equipo, mis jugadores y yo somos igual de competitivos... y quiero volver a ganar con ellos. Tengo un grupo competitivo; aquí es donde me encuentro hoy...", contó Doc Rivers, entrenador de Boston, que aclaró (o no aclaró) los puntos suspensivos con una sugerencia inquietante... "pero mañana puedo cambiar mi pensamiento". Rivers sabe de sobra que es uno de los grandes objetivos del viejo Jerry Buss para ocupar el banquillo de los Lakers. ¿Es que ya le han dicho algo? Estos Lakers de 2011 pueden hallarse a la misma altura competitiva (o parecida) que los Celtics de 2008. Los Celtics de 2011 son como tres años mayores. ¿Atamos cabos...?

Después, en el furibundo Oklahoma City Arena, los Memphis Grizzlies vivían un tormento: los Thunder les pasaron por encima con un parcial de 15-2 en los últimos cinco minutos de la primera parte... y Memphis ya no levantó cabeza. A 5.00 del descanso, Marc Gasol (15 puntos en serie de 6/9, cinco rebotes y dos tapones en 31:14 el mejor 'grizzly' de largo) selló su primera canasta en un imponente 'slam dunk', en tráfico: era 30-31 para los Grizzlies... que de repente, sufrieron la sacudida de una oleada o tornado de los Thunder, cerrada en 45-33, otros 'slam dunk'... de Serge Ibaka: nueve puntos, cuatro rebotes, tres tapones... y mucha intimidación física en 21:16.

El 45-33 del descanso dio paso a otro parcial de 25-17 en el tercer cuarto que acabó de cortar las zarpas a los Grizzlies, cuyo principal problema es la ausencia de tiro exterior (2/8 en triples) para descargar la brutal presión que sufren sus hombres altos: Marc y Zach Randolph, que ya no resiste el ritmo de la serie ni la presión física de la zona de ajuste de Oklahoma. Zach se frenó en nueve puntos (3/9) y siete rebotes. Excepto Marc, ningún 'grizzly' atravesó la decena de puntos. Como Randolph, Conley y Arthur se detuvieron en nueve. Ante la zona ajustada en 2-1-2 de los Thunder, los Grizzlies se estrellaron y cedieron el rebote (50-33), mientras los Thunder volaban en transición, guiados por Durant (19 puntos, no en su mejor noche), Cook (18) e incluso el gladiador Nick Collison: nueve puntos, diez rebotes. Westbrook se limitó a 11 puntos y los Thunder propinaron otra paliza a los Grizzlies en el porcentaje de aciertos en tiro: 37/78, 47,4%... por un ínfimo 28/78, 35,9% de Memphis, 11,5 puntos de diferencia en el cociente. Si contra una zona cerrada en el interior no entra el tiro... no hay nada que hacer.

Por lo demás, Memphis no pasó mal, 15 asistencias y 14 pérdidas, con Oklahoma en 22/17, en ese cociente asistencias/pérdidas, pero hubo demasiada diferencia en demasiados aspectos clave: los Grizzlies incluso bajaron el cociente de aciertos en tiros libres del 80% al 60%. "No permitimos que la fatiga nos afectara, estuvimos listos desde el principio y supimos que íbamos a ganar en defensa", explicó Kevin Durant. Todo terminó con 99-72, 3-2 para los Thunder... y mañana, en Memphis, el sexto asalto. No parece que los Grizzlies vayan a rendirse tan fácil: no en Memphis.